El estado griego está asesinando a Dimitris Koufontinas

Dimitris Koufontinas

APO/IFA

Dimitris Koufontinas, que está en huelga de hambre desde el 8 de enero y cuyo estado de salud es ahora crítico, se enfrenta a su exterminio calculado, una clara opción política del gobierno de Nueva Democracia. Los mecanismos del Estado, que han estado invirtiendo en la fascistización, la explotación brutal y la intensificación de la represión contra cualquier forma de resistencia social atacando constantemente al movimiento anarquista, están ahora esculpiendo una horrible realidad en el cuerpo del huelguista de hambre.

Una realidad en la que la vida de un preso político se pondera en la balanza de la agenda política de extrema derecha de un régimen en decadencia generalizada. Estxs tiranxs sedientxs de poder, que han decidido condenar a muerte al huelguista de hambre, son los que han ido imponiendo el empobrecimiento y los campos de concentración, en los que lxs niñxs pequeñxs corren peligro por el frío, y han propiciado el tráfico en todas sus formas, desde la explotación sexual hasta el abuso de menores. Son ellxs lxs que han estado deteniendo y golpeando a cientos de personas cada día en todo el país, porque “se atreven” a protestar.

La prohibición de las protestas políticas, mientras lxs trabajadorxs se agolpan en los lugares de trabajo y en los transportes públicos, demuestra que, para lxs gobernantxs, la pandemia no es más que una herramienta de imposición. La muerte de miles de personas durante la pandemia es el resultado de sus políticas, orientadas al lucro y al control, que han llevado a la disolución del sistema de salud pública y han impuesto el hacinamiento en los lugares de trabajo y en los mercados. Las operaciones autoritarias, en forma de toques de queda, ataques contra lxs manifestantxs, persecuciones continuas y aumento de los cargos, son pasos hacia la instauración del totalitarismo moderno. La escalada de la rabia social se expresa en este momento en las continuas y persistentes movilizaciones de cientos de personas, principalmente del movimiento anarquista, contra la represión y en solidaridad con la huelga de hambre, pero también en las protestas masivas contra la reestructuración de la educación pública. Se expresa a través de pequeños y grandes actos de resistencia, que se multiplicarán.

La huelga de hambre de Dimitris Koufontinas y la posibilidad de que pierda la vida a manos del Estado, es un punto de no retorno para lxs autoritarixs, que ratificarán así la imposición del Estado fascista declarando una guerra de consecuencias imprevisibles, teniendo como primera víctima a un preso político. Y para el pueblo de la lucha y toda la sociedad, que encontrarán en su contra lxs asesinxs de Koufontinas, sus opresorxs, totalmente incontenibles.

¡Dimitris Koufontinas debe vivir,

Su lucha debe vencer!

Anarchist Political Organization (APO) – Federación de colectivos

Contra el estado de excepción para lxs presxs políticxs

El Estado está asesinando al huelguista de hambre y sed Dimitris Koufontinas. ¡Resiste!

Inmediato cumplimiento de su demanda de ser tranferido a la prisión de Korydallos

Desde el 8 de enero, el preso político D. Koufontinas está en huelga de hambre, resistiendo al totalitarismo estatal, que intenta vengativamente imponer un estado de excepción contra él y contra todxs lxs que son objetivo de la represión estatal. El 22 de febrero, pidió a lxs médicxs de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital de Lamia que le quitaran los tubos del brazo que le hidrataban, ya que no podía beber agua, debido al agotamiento. En contra de las continuas operaciones represivas y de la intimidación ideológica y la propaganda de los medios de comunicación que las acompañan, D. Koufontinas optó por resistir iniciando una huelga de hambre, exigiendo su derecho indiscutible, concedido incluso por la última ley autoritaria que vulnera los derechos de lxs presxs políticxs, su traslado a la prisión de Korydallos.

La continua expansión del estado de excepción sobre lxs presxs políticxs es parte del ataque más amplio a los derechos de lxs presxs y del horrible escenario en las cárceles, configurado por el Estado durante la pandemia. Además, forma parte del ataque generalizado del Estado contra la resistencia social y de clase y las luchas, para imponer una distopía de intensificación de la explotación, la represión y la sumisión.

Contra la brutalidad estatal y capitalista y las operaciones contrarrevolucionarias para la imposición del totalitarismo moderno, la lucha de D. Koufontinas, como cualquier otra lucha por la vida, la dignidad, la libertad, la salud y la educación… ¡es la lucha de todxs!

¡LA SOLIDARIDAD ES NUESTRA ARMA!

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